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Las pinturas de la gama «OPAL», que se suelen denominar «madre de los nácares» o efectos dicroicos, forman parte de los efectos de cambio de color. Es una gama de pintura opalescente que no se parece a ningún otro tipo de pintura, primero porque es incolora y que, dependiendo del ángulo y de la luz, produce reflejos opalescentes que se parecen ...
> Leer másLas pinturas de la gama «OPAL», que se suelen denominar «madre de los nácares» o efectos dicroicos, forman parte de los efectos de cambio de color. Es una gama de pintura opalescente que no se parece a ningún otro tipo de pintura, primero porque es incolora y que, dependiendo del ángulo y de la luz, produce reflejos opalescentes que se parecen a los colores de algunas conchas.
La gama está compuesta por 6 colores incoloros iridiscentes, formados por nácares extremadamente finos y que crean reflejos con 2, 3 o incluso 4 tintas. Recientemente, se han introducido 5 nuevas referencias QUASAR. Se trata de colores de excepción, con colores más fuertes y más iridiscentes, además de cambios de color más radicales.
Los colores son variados (desde el dorado, pasando por el rosa, el naranja, el verde, hasta el azul o el violeta) y están formados, no por pigmentos, sino, por pura luz.
Los efectos son casi invisibles en ausencia de luz directa.
Estos productos con un aspecto blanco nacarado son capaces de reflejar la luz en ondas iridiscentes multicolor al estilo de algunos minerales (piedras semipreciosas) o algunas conchas, formados por elementos de síntesis. Se trata de productos extremadamente resistentes a las temperaturas, UV, luz, intemperie...
El ámbito de uso es amplio y sus magníficos efectos visuales abren la ruta a nuevas y originales creaciones para las carrocerías de automóvil, los frascos de perfumes o de alcohol, los objetos de diseño, las superficies o los electrodomésticos.
Stardust® propone 11 colores opalescentes (una serie de 5 estándar y 6 Quasar), en forma de pinturas disueltas o al agua, muy fácil de aplicar (con pistola).
La aplicación de la pintura opalescente se hace en un fondo claro: es decir, preferentemente blanco, pero también se puede utilizar en el fondo de color que se quiera. Por ejemplo, las pinturas opalescentes dicroicas se pueden aplicar en fondo gris, azul cielo, rosa... o en cualquier tono de colores pasteles o más vivos.
Estas pinturas raras, sorprendentes y magníficas pueden pasar del fondo blanco y aplicarse directamente en un soporte translúcido, como el cristal de un frasco o un plástico.
Simplemente hay que respetar el modo de aplicación utilizando en una primera etapa una imprimación de agarre transparente para el cristal o el plástico (véanse las imprimaciones específicas de Stardust).
La palabra «dicroico» significa que la superficie de la pintura tiene la capacidad de fragmentar la luz en varias ondas de color. Esta tecnología tiene intereses principalmente visuales. Además, aporta una gran innovación por su aspecto estético y por reenviar la luz y proteger el soporte. Por ejemplo, se podría imaginar una aplicación en placas de aluminio que se coloquen en las torres de los edificios, lo que produciría edificios que cambian de color y cuya fachada tendría una duración mayor.